Todo poco a poco vuelve a su sitio.
Felices fiestas a todos.
Muévanse por hacerlas especiales, y roben sonrisas.
Que lo único que vale la pena de estas fechas, es hacerlas especiales.
Ni las luces, ni los polvorones, ni el árbol, el belén o los regalos.
Lo que se esconde tras tanto adorno, es el sentimiento de querer hacer feliz, demostrar nuestro cariño y compartir nuestro tiempo.
El resto, es solo un cuento.
¡Me encanta!
ResponderEliminarMis comisuras están súper marcadas y eso siempre es buena señal.
Un saludo.